my chemical romance
Los cinco integrantes cultivan un estilo que es principalmente de punk-rock, aunque con un sonido bastante moderno y detalles que marcan una influencia hacia el heavy metal, coros muy melódicos - bastante "oreja" - y ciertos arreglos más atmosféricos que logran dar un respiro.
Se trata de trece canciones muy entretenidas, que van directo a la vena. Cuando crees que todo va a detenerse después de tanto darle, aparece el baterista (gran labor durante todo el álbum con los redobles que realiza) para seguir acelerando.
"Three Cheers for Sweet Revenge" suena muy bien, tiene una gran producción que permite que esté lleno de detalles. La voz juega con varios tipos de grabaciones y efectos, además de la fuerza que se le inyecta a los coros. Destacada también es la creación de ambientes y la combinación que se da entre los distintos instrumentos, cada uno tiene su espacio escuchándose y creando un bloque que suena compacto a la vez.
En definitiva, estamos en presencia de una nueva banda que tiene algo que aportar. En un mundo donde no todo es pop, My Chemical Romance surge para ponerle crudeza al rock y emoción. Mucha emoción. Después de todo quizás haya vida. Hay que esperar ver la evolución de este grupo. Pero por mientras si quieren rockear, podrán pasar un gran rato.
Con un nombre inspirado por el escritor Irvine Walsh, la historia de My Chemical Romance se inicia en el 2000 en los suburvios de Nueva Jersey cuando el cantante Gerard Way y el baterista Matt Pelissier, amigos desde la secundaria, deciden comenzar a componer canciones con la idea de formar una nueva banda. Al poco tiempo invitan al guitarrista Ray Toro y finalmente se les unen el guitarrista Frank Lero y el bajista Mikey Way (hermano de Gerard). El quinteto debuta en el 2002 con "I Brought You My Bullets, You Brought Me Your Love", producido por Geoff Rickly y editado por el sello independiente con base en la ciudad de Nueva York Eyeball Records. Pronto su estilo oscuro y palpitante, con evidentes muestras de agonía introspectiva, "violento y peligroso" como le llama su propio vocalista, convence a los ejecutivos de Reprise Records quienes los unen a su elenco de artistas. Luego de dos años
la banda regresa con "Three Cheers For Sweet Revenge", producido por Howard Benson y en el que persisten en su mezcla de la acidez del Gothic-rock británico de los ochentas con sus propias influencias de rock pesado. En el 2006 presentan "The Black Parade" adelantado por WELCOME TO THE BLACK PARADE


